¿A qué se debe la nube y la niebla con la que ha amanecido Granada?
Aunque se ha podido confundir con contaminación, los niveles tras las lluvias están bastante controlados
Una niebla, densa en algunas zonas de la capital y del área metropolitana, ha dado los buenos días a los granadinos este martes. Posteriormente se ha camuflado con una nube negra que podría paracer contaminación. La típica ‘boina’ de humo negro que se instala en la ciudad y el cinturón. Un fenómeno extraño teniendo en cuenta que las lluvias de los últimos días han limpiado el ambiente.
Los niveles de contaminación en la ciudad este martes están por debajo de los límites establecidos en casi todas sus estaciones, salvo en la Norte, donde se supera por poco el dióxido de nitrógeno (27,5 sobre 25 que marca como límite máximo).
Manuel Morales, meteorólogo, observador aeronáutico de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) y profesor de Meteorología Aeronáutica, aclara que los niveles de este martes y de días precedentes son bastante «buenos» dentro que que en Granada «los niveles son bastante altos» casi siempre. Apunta que las lluvias de los últimos días han provocado lo que se denomina «inestabilidad», es decir, movilidad vertical del aire, lo que ha ayudado a que se limpie el ambiente.
A partir de este martes se esperan varios días de «estabilidad», es decir, cielos despejados y sol, que van a contribuir a que los niveles de contaminación vayan subiendo y es de esperar que para finales de semana se registren índices mucho más preocupantes.
Por lo tanto, lo que se ha producido este martes por la mañana han sido brumas matinales y niebla asociadas al cambio de tendencia del tiempo en la ciudad y su área metropolitana. De días de lluvia y humedad se ha pasado a cielos que se han ido despejando y la humedad acumulada se ha ido elevando hasta desaparecer.
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