El rey emérito marcha de Sanxenxo tras una presencia pública testimonial
El rey emérito Juan Carlos I marchó de tierras gallegas este domingo por la tarde tras una estancia de cinco días en la localidad pontevedresa de Sanxenxo, adonde llegó el miércoles al mediodía. Allí asistió a las regatas de la Copa del Rey de vela, aunque solo participó en un par de sesiones por el estado del mar. En su última mañana en la zona acudió al puerto para ver los preparativos finales del Bribón 500, barco del que en un principio se dijo que iba a ser su patrón, antes de reanudarse el torneo referido.
En cuanto a su esperada presencia en algún acto público, fue prácticamente testimonial, al igual que las ocasiones en las que se le pudo ver fuera del vehículo en el que se desplazó estos días junto a sus escoltas y algún amigo. Como ya ocurriera en su primer viaje similar, hace casi un año, el exmonarca se alojó en casa de su amigo Pedro Campos, veterano regatista y presidente histórico del Real Club Náutico de Sanxenxo.
De esa forma, esta segunda estancia en Galicia desde que en agosto de 2020 decidiera fijar su residencia en Abu Dabi, en una especie de exilio presionado por las informaciones aparecidas en España tras las investigaciones judiciales y tributarias abiertas sobre su patrimonio, ha estado claramente marcado por la discreción y la privacidad. De hecho, no ha realizado ni una sola declaración a los numerosos periodistas que han cubierto estos días su presencia en Sanxenxo.
El exmonarca español se dispone a subir la escalerilla del avión en el aeropuerto vigués de Peinador para dejar tierras gallegas.
E. P.
Sin ver a su hijo
Tampoco esta vez ha visitado Zarzuela para reunirse con el Rey Felipe, como sí hizo en mayo de 2022 cuando, tras pasar unos días en Sanxenxo, llevó a cabo una escala en Madrid para mantener un encuentro con su hijo. Después del mismo, la Casa del Rey le recordó a Juan Carlos I que en la carta que mandó dos años antes para notificar que Abú Dhabi sería su residencia permanente también comunicó que cuando visitara España quería hacerlo con «la mayor privacidad posible».
Finalmente el rey emérito dejó tierras pontevedresas sobre las 18:00 horas de este domingo tras despegar su avión del aeropuerto de Peinador junto a Vigo. Lo hizo en un vuelo privado con destino a Vitoria, donde aterrizó en torno a una hora más tarde y salió del aerodromo de Foronda en una furgoneta para varios pasajeros con cristales tintados. En la capital alavesa, según varias informaciones recogidas por Europa Press, visitaría a algunos especialistas médicos para tratar sus problemas de rodilla, en concreto a uno de sus médicos de referencia, el traumatólogo Mikel Sánchez.
Enlace de origen : El rey emérito marcha de Sanxenxo tras una presencia pública testimonial